"Anda plácidamente entre el ruido y la prisa, y recuerda qué paz puede haber en el silencio.
Vive en buenos términos con todas las personas, todo lo que puedas sin rendirte.
Di tu verdad tranquila y claramente.... Se tú mismo. Especialmente, no finjas afectos. Tampoco seas cínico frente al amor; porque frente a toda aridez y desencanto el amor es perenne como la hierba.
Sé amable contigo mismo. Tú eres una criatura del universo, no menos que los árboles y las estrellas; tu tienes derecho a estar aquí. Y te resulte evidente o no, sin duda el universo se desenvuelve como debe.
Cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones, mantén en la ruidosa confusión, paz con tu alma.
Con todas sus farsas, trabajos y sueños rotos, este sigue siendo un mundo hermoso. Ten cuidado, esfuérzate en ser feliz."
Anónimo, encontrado en la vieja iglesia de Saint Paul, Baltimore 1693.
No hay comentarios:
Publicar un comentario